Acacia

¿Qué son las acacias?

Muchas de estas plantas de crecimiento agresivo desarrollan troncos macizos, retorcidos y/o multifurcados, con ramas torcidas, caóticas y espinosas, que contrastan fuertemente con sus suaves flores estrelladas, blancas o doradas, y con las líneas geométricas de sus hojas bipinnadas.

La mayoría de las especies de Acacia (entre 957 y 975) se encuentran en Australia, donde se las conoce cariñosamente como «barbas». Este apodo se debe a que los primeros colonos utilizaban ramas de Acacia apiladas o tejidas (watul en inglés arcaico) para construir los armazones de sus chozas de barro.

Otros nombres para las acacias son Thorntrees (para las especies con espinas dorsales) y Mimosas. Este último nombre es engañoso, ya que designa a un género distinto de la familia de las leguminosas, cuyas especies comparten muchas características botánicas con las acacias. El ejemplo más conocido de este solapamiento es Mimosa hostilis, que inicialmente se identificó como Acacia tenuiflora.

Además de las Acacias endémicas de Australia, existen otras especies en el sur y el sureste de Asia, Taiwán, Hawai, la isla de la Reunión, algunas islas del Pacífico y Oriente Próximo. Como en el caso de muchas especies de Mimosa, se descubrió que las Acacias nativas de Sudáfrica y América pertenecían en su mayoría a un linaje genético diferente, lo que provocó décadas de debate botánico, que finalmente desembocó en la fragmentación del género Acacia en cinco subgrupos.

Así fue como unas 400 plantas anteriormente reconocidas como Acacias se reclasificaron en 2005 en dos nuevos géneros: Vachellia y Senegalia. Se añadieron otros dos géneros más pequeños -Acaciella y Mariosousa- para dar cuenta de las pocas docenas de especies más divergentes nativas de la costa mexicana del Pacífico. El resto de especies (sobre todo las de Australasia) conservaron sus denominaciones botánicas originales.

¿Qué hace que las acacias sean impresionantes?

Independientemente del entorno en el que se encuentren, las acacias pueden adaptarse a él. Así, en ciertos climas son perennes, mientras que en otros pierden sus hojas. La resistencia natural de las acacias les permite prosperar incluso en las condiciones más áridas, donde apenas puede sobrevivir otro tipo de vida. El árbol solitario más famoso jamás descubierto, el Árbol de Teneré, fue una Acacia que vivió misteriosamente durante 300 años en medio del desierto del Sáhara nigeriano, a 250 millas de cualquier otro árbol.

De hecho, algunas Acacias australianas que se introdujeron en América y Sudáfrica se han sentido tan cómodas en los nuevos entornos que han empezado a apoderarse de los pastizales y las zonas agrícolas locales. Al ser casi imposibles de exterminar, ahora se consideran especies invasoras en estas tierras; algunas, como la Acacia mearnsii, han llegado incluso a figurar en la lista de las 100 principales especies invasoras de todo el mundo.

Otro testimonio de la indestructibilidad de las acacias es que algunas de ellas crecen legítimamente del fuego. Por ejemplo, la germinación de la Acacia obtusifolia se desencadena con éxito al exponer sus semillas a altas temperaturas, y suele ser una de las especies pioneras de la flora que emerge tras los incendios forestales en Australia.

Muchas acacias tienen espinas para defenderse de los animales que pastan, como camellos, jirafas y canguros. En realidad, el nombre Acacia deriva de la antigua palabra griega ακις (akis), que significa espina. Fue dado a la especie A. nilotica por el botánico, médico y farmacólogo Pedanius Dioscorides hace unos 2.000 años.

Algunas especies centroamericanas, conocidas colectivamente como acacias de cuerno de toro, son conocidas por desarrollar espinas exquisitamente duras, gruesas y rechonchas, que sirven para albergar ciertos tipos de hormigas. Las hormigas se alimentan de la secreción de savia de los pecíolos (tallos de las hojas) de la planta; a cambio, luchan contra los herbívoros e incluso destruyen la flora competidora alrededor del árbol.

Las espinas no son la única arma que esgrimen las acacias para proteger sus preciadas hojas. Todas las especies producen taninos, que pueden ser muy tóxicos e incluso mortales si se consumen en cantidades suficientes. Además, los árboles son capaces de detectar cuándo se comen sus hojas, momento en el que emiten etileno al aire. Esta sustancia química, que viaja con la brisa hasta las acacias cercanas, les indica que aumenten también la producción de taninos.

En condiciones especialmente soleadas, las hojas de algunas acacias se reducen o desaparecen por completo. Asumiendo el papel de hojas, los tallos se expanden y aplanan, convirtiéndose en filodios fotosintéticos, que se orientan hacia el sol para moderar la exposición directa a la luz.

Aparte de la producción de taninos, todas las acacias tienen en común que producen frutos leguminosos alargados. Las vainas de estas leguminosas, al igual que las propias semillas, así como las flores y las hojas jóvenes de algunos árboles, son comestibles y se han utilizado durante mucho tiempo como fuente de alimento tanto para los seres humanos como para el ganado, así como análogo del café por los pueblos aborígenes australianos, del sudeste asiático y mesoamericanos.

El uso dela acacia a lo largo de la historia

A lo largo de la historia, muchas culturas han reconocido que las acacias son plantas únicas con una amplia gama de propiedades poderosas y útiles.

En la antigua mitología egipcia, la acacia, conocida como shont, shonnet, shondj o shondet, se consideraba sagrada para la diosa Isis y se asociaba con el Árbol de la Vida y con los dos leones que custodiaban el paso al otro mundo. También se creía que los espíritus de los difuntos utilizaban partes del árbol para curarse y protegerse del mal en ese reino.

La acacia aparece en numerosos mitos que narran las historias de la diosa Isis y su familia. Isis y su hermana, Neftis, eran conocidas como las Dos Diosas Shonti (Acacia). En los Textos de las Pirámides se dice que Horus, hijo de Isis, «salió de la acacia “, y a Osiris, marido de Isis, se le describe como ”el Solitario en la Acacia» porque, tras su muerte, cuando su sarcófago apareció en las costas de Biblos, se le encontró envuelto por el mágico crecimiento de una acacia.

Aparte de su profundo papel en la mitología, la especie local, Acacia nilotica, encontró numerosas aplicaciones en la medicina y la manufactura del antiguo Egipto. Sus flores se utilizaban para curar afecciones cutáneas, sus hojas para resolver la tos y tratar heridas e inflamaciones, sus vainas para alimentar al ganado, su goma como anticonceptivo, su corteza rica en taninos para curar quemaduras y teñir el cuero, y su robusta madera para construir barcos, sarcófagos y muebles.

El significado espiritual de la Acacia también podría haber sido reconocido en la Biblia – se ha especulado que una especie de Acacia endémica del desierto del Sinaí podría haber sido la «zarza ardiente» que habló a Moisés como Dios. Si una planta de tamaño decente que contuviera DMT ardiera en llamas y la persona que se encontrara junto a ella inhalara su humo, es posible que esto indujera un estado alterado de conciencia y la experiencia de una comunicación divina.

También se cree que la Acacia seyal fue la fuente de la madera de shittim , que, según el Libro del Éxodo, se utilizó para construir la reliquia religiosa más sagrada de los israelitas, el Arca de la Alianza.

En la masonería, las acacias simbolizan la pureza y la resistencia espiritual en vida, así como la resurrección y la inmortalidad en contextos funerarios. Según una leyenda masónica, Hiram Abiff, arquitecto jefe del Templo del Rey Salomón, fue asesinado por sus artesanos tras negarse a divulgar los secretos de los maestros albañiles. Los agresores lo mataron y lo enterraron en una tumba que marcaron con una ramita de Acacia.

En la India, Nepal, Tíbet y China, la corteza, la raíz y la resina de la ac acia se utilizan desde la antigüedad para elaborar incienso. Se cree que el humo de la corteza de Acacia apacigua a los dioses y aleja a los demonios y espíritus, mientras que la raíz y la resina de Acacia se combinan con otras hierbas e ingredientes para producir diversos tipos de incienso.

En la medicina ayurvédica, la Acacia nilotica se utiliza para tratar la eyaculación precoz, y la Acacia (Senegalia) catechu se emplea como limpiador de la piel y antiinflamatorio. Un extracto de esta última se denomina Catechu y también es un agente curtiente y tintóreo para la lana, la seda, el algodón y el cuero, así como un ingrediente importante en las mezclas de nuez de betel (paan) del sur de Asia.

Los pueblos indígenas australianos también utilizaban la acacia por sus propiedades recreativas. Se sabe que la ceniza obtenida de la combustión de una de varias especies de Acacia se consumía con pituri, tabaco de mascar elaborado con Duboisia hopwoodii o una especie local de Nicotiana, por sus efectos estimulantes o calmantes (según la composición y el uso).

Desgraciadamente, los rituales de los aborígenes iniciados siempre se mantuvieron en estricto secreto, por lo que no existen registros que respalden la conjetura de que esta cultura practicara el hábito de fumar acacias. Si los aborígenes utilizaban las acacias para experiencias místicas, es posible que los colonos se interesaran por estas plantas al enterarse por los lugareños de su uso.

En cualquier caso, la acacia dorada (Acacia pycnantha Benth.) es el símbolo oficial de Australia desde 1838. La planta ocupa un lugar destacado en el escudo de armas del país y se celebra a escala nacional cada 1 de septiembre para marcar el comienzo de la primavera. No se sabe si el Gobierno era consciente de las potentes propiedades psicodélicas del zarzo cuando lo eligió para representar a la nación.

En la actualidad, además de servir como fuente de enteógenos para una generación de psiconautas, varias partes de numerosas especies de acacias se siguen utilizando con fines muy diversos:

• Las semillas y las vainas deAcacia se consumen en México, y los brotes son un ingrediente común en las cocinas birmana, laosiana y tailandesa.
• Los extractos aromáticos de las plantas de Acacia se añaden a muchas bebidas y dulces occidentales, así como a perfumes.
• La goma de los árboles de Acacia se utiliza como suplemento dietético, medicamento, emulsionante, espesante, recubrimiento y pegamento para muchas cosas (incluida la parte pegajosa del papel de liar).
• Los taninos dela acacia se utilizan como ingredientes en pinturas y tintes.
• La madera deacacia se utiliza en carpintería y como leña.
• Lasacacias se cultivan con fines ornamentales o para recuperar tierras dañadas por la erosión.

Si se consume un té de Acacia, la proporción de triptaminas y fenetilaminas del árbol determinará el perfil de efecto específico de la infusión. Esto significa que las experiencias con diferentes especies de acacia suficientemente psicoactivas no serán las mismas.

Beber diferentes tés de Acacia es una forma excelente de conectar con el espíritu de esta planta sagrada. Sin embargo, este enfoque es típicamente tomado sólo por practicantes comprometidos de la medicina de plantas, mientras que la mayoría de los psiconautas recreativos prefieren extraer DMT de unas pocas especies selectas de wattle con concentraciones altas y confiables de triptamina. Estas incluyen: A. confusa, A. acuminata, A. obtusifolia, A. maidenii, y A. floribunda.

Beneficios dela acacia

Debido al extenso y antiguo uso de las acacias para diversos fines terapéuticos en todo el mundo, muchas de estas poderosas especies de plantas han recibido corroboración científica de su eficacia contra: microbios, hongos, parásitos, virus, malaria, filaria, ciertos tipos de cáncer, oxidación celular, hipertensión, fiebre, diabetes, piel seca/dañada, poros obstruidos y espasmos musculares, así como de sus propiedades inmunomoduladoras y abortivas.

Esta tabla, extraída de una reciente revisión de la investigación, resume la literatura científica disponible que confirma la mayoría de las propiedades terapéuticas señaladas para docenas de especies de Acacia.

Legalidad dela Acacia

En la mayoría de los países occidentales, la materia vegetal en sí sigue siendo legal para comprar y poseer en gran parte del mundo, con algunas excepciones, entre las que se incluyen: Canadá, Dinamarca, Finlandia, Francia, Grecia, Islandia, Lituania, Polonia, Suiza y el Reino Unido.

¿Dónde comprar Acacia legalmente?

Aquí en Maya Ethnobotanicals, ofrecemos una gama de plantas medicinales tradicionales que han sido utilizadas por los pueblos indígenas para una variedad de propósitos desde la antigüedad.

Nuestros productos se cultivan orgánicamente, se cosechan de forma sostenible y se obtienen a través del comercio justo, y los vendemos con la intención de promover el entusiasmo etnobotánico en todo el mundo.

No abogamos por el uso de ninguno de nuestros productos de forma ilegal, ni enviamos ninguna de nuestras muestras botánicas a países donde son ilegales. Aconsejamos a nuestros clientes que se informen bien sobre la normativa local antes de realizar un pedido.

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